El Ferrocarril de Sóller (Tren de Sóller) es un ferrocarril de vía estrecha en la isla española de Mallorca. Conecta la ciudad de Sóller con la capital de la isla, Palma de Mallorca. Se abrió en 1912, principalmente para transportar naranjas y limones a los mercados de la capital.
El ferrocarril de la Sierra de Alfàbia tiene un terreno difícil y supera a la Sierra de Alfàbia. El ancho de la cresta es de 2,8 km. y la altura es de 496 metros sobre el nivel del mar. Para ello, en sólo siete kilómetros, el ferrocarril se eleva a 199 metros con pendientes que llegan a 23 ‰. A lo largo de 27 kilómetros hay 13 túneles y varios puentes, incluido el viaducto de Cinc-Ponts.
Debido a sus excelentes vistas, el ferrocarril tiene una gran demanda entre los turistas. El tren conecta con el tranvía Sóller - Port de Sóller, que a su vez conecta con los barcos a la playa de Sa Calobra y a los desfiladeros del Torrent de Pareis. Hay siete pares de trenes al día durante la temporada, de marzo a octubre. De noviembre a febrero, cinco pares de trenes al día. El coste del viaje es de 19,50 euros. En 1929, el ferrocarril fue electrificado. A partir de ese momento, se convirtió en una atracción turística.
La línea de ferrocarril Palma - Sóller se caracteriza, entre otras cosas, por un ferrocarril de vía estrecha con un ancho de vía de 914 mm. Y un auténtico tren, que actualmente es uno de los principales atractivos de Mallorca por derecho propio.
El tren pasa y hace una parada en Bunyola. En Palma, el tren sale (y llega) de la estación del Ferrocarril de Sóller, situada en la calle Eusebi Estada, 1.
En Sóller, el tren llega (y sale) de la estación del Ferrocarril de Sóller, situada en la plaza de España.
El horario de los trenes depende de la temporada. El costo de un viaje de ida es de 18 euros, el viaje de ida y vuelta cuesta 25 euros. Los billetes se pueden comprar en las taquillas de las estaciones de tren.